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miércoles, 21 de agosto de 2019

¿VUELVEN LOS MILITARES A LA POLÍTICA?


"La historia ocurre dos veces: la primera como una gran tragedia y la segunda como una miserable farsa" escribió Marx en el encabezamiento de su obra El 18 de brumario de Luis Bonaparte, en 1852.

Hoy en Bolivia 2019 algo parecido sucede, veamos la tragedia: Para 1964, el presidente Víctor Paz había decidido repostularse inconstitucionalmente a un nuevo período ya que la Constitución no permitía la reelección; sin embargo, aprovechando su mayoría parlamentaria, impuso su repostulación y, viendo que había mucha resistencia a sus propósitos, buscó el apoyo de las FFAA que, tras su destrucción por el pueblo en 1952, se habían reconstituido bajo la visión del MNR, así, el Colegio Militar se había reabierto bajo una nueva composición social, “con este fin, impuso cuotas, un 30% para los hijos de obreros, un 20% para hijos de campesinos y el 50% para los hijos de los miembros de la clase media que pertenecen al MNR”. (Lavaud, Jean Pierre, El embrollo boliviano).

Es así que en la repostulación inconstitucional de Víctor Paz a su tercer periodo presidencial, su principal soporte fue militar: el Gral. Eduardo Rivas Ugalde era jefe del comité político nacional del MNR, el Gral. Barrientos, candidato vicepresidencial, militares los prefectos de los principales departamentos y toda decisión política importante era discutida con el Alto Mando.

En las elecciones del mayo de 1964, ante la abstención de la mayoría de los partidos de oposición, triunfó el binomio Paz-Barrientos y el 6 de agosto juraron a sus cargos ante el Congreso Nacional. Sin embargo, poco duró la alegría del reelecto presidente ya que el 4 de noviembre de 1964, los militares encabezados por miembros de la célula militar del MNR, generales Barrientos y Ovando (supuestos guardianes del MNR en las FFAA) derrocaron a Paz Estenssoro e iniciaron un largo período de sangrientas dictaduras militares que duró hasta el 10 de octubre de 1982.

Esa fue la tragedia, ahora veamos la farsa: El presidente Morales, también candidato inconstitucional, ha anunciado durante su discurso en la parada militar del 7 de agosto de 2019 que las Fuerzas Armadas tendrán participación en los directorios de las empresas estatales. Explicó que su intención es que la entidad castrense tenga mayor responsabilidad en la seguridad de los sectores como energía e hidrocarburos.

Por su parte, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, general de ejército, Williams Kaliman, en nombre de unas supuestas nuevas FFAA en proceso de adoctrinamiento bajo los moldes “anticapitalistas del proceso de cambio”, lanzó un mensaje amenazante a los que llamó "antipatrias". “Un mensaje a nuestros gratuitos detractores y antinacionalistas que por su apetito de poder piden cambiar la estructura vertical, la disciplina y la jerarquía de las FFAA, con oscuras intenciones", dijo el general Kalimán.

El paralelo es significativo, pero ni Evo Morales es Víctor Paz Estenssoro ni Kalimán es Barrientos y mucho menos el pueblo boliviano de hoy está dispuesto a someterse a nuevas dictaduras ni civil, ni militar, ni mixtas, por ello, la farsa terminará como termina toda farsa, los farsantes rechazados y el pueblo restaurando el Estado de derecho para continuar el proceso de fortalecimiento de la democracia. Es de esperar solamente que el presidente Morales transmita el mando de la nación pacíficamente y no se resista a la voluntad popular.